En medio de la crisis deportiva que vive el Real Cafetero, se suma la lesión de Harby Arce, un hombre referente en el equipo que orienta Jonny Mauricio Cruz.
La falta de gol o de concreción en la red contraria se ha convertido en un verdadero dolor de cabeza para el club Real Cafetero, que sigue naufragando en la Copa Postobón de Microfútbol Profesional.
El combinado que dirige Jonny Mauricio Cruz, a pesar de la última derrota en casa 8-2 ante Bello Innovar 80, se entrena para recibir este sábado a las 8:00 p.m. al Real Opita, pero el vallecaucano sigue siendo duda por lesión.
El jugador lleva más de 20 días lesionado en el tobillo derecho por un golpe que recibió en un juego en Pasto contra Leones de Nariño.
Por tal razón, no ha podido entrenarse de la mejor manera y apenas el sábado pasado reapareció pero no estuvo en toda su dimensión.
El jugador aseguró que está dando lo mejor de sí para recuperar su verdadero nivel y aportarle al equipo en la segunda vuelta del torneo profesional. “Con el médico Gustavo Portela trabajamos sin descanso porque la idea es volver a los trabajos de cancha lo antes posible. Es algo que se me ha vuelto un reto personal, nunca me había lesionado tanto tiempo”, mencionó.
Salvo este inconveniente que presenta Harby Arce, los demás integrantes del equipo se encuentran en condiciones adecuadas para afrontar el juego del sábado en la noche y que será correspondiente a la fecha 10 de la Copa Postobón de Microfútbol.
De otro lado, los jugadores del Real Cafetero mantienen la expectativa por levantar el rendimiento en el torneo en el que este año han pagado caro el precio de afrontar un nuevo proceso.
Este jueves en la noche en un trabajo específico, quedará clarificada la nómina para recibir al combinado huilense.
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