A pesar de que el gobernador Julio César López Espinosa se había comprometido a apoyar al club Real Cafetero, hoy la escuadra continúa siendo una de las más abandonadas de Colombia.
El equipo que nació en 2010 con el objetivo de convertirse en el ideal de los miles de niños quindianos que practican el microfútbol y sueñan con algún día convertirse en profesionales vive una ‘infancia complicada’.
Las promesas de la administración seccional parecen quedarse sólo en eso, algo que se ha convertido en un factor común cuando de hablar de deporte se trata.
El compromiso con la actividad muscular del ‘Corazón Verde’ sigue siendo escaso y muestra de ello es Real, que se mide a los mejores del país casi con las uñas o con menos que eso.
Lo más preocupante de la situación es que la idea de continuar con el equipo en esta vigencia nació en el seno de la gobernación, pues la ilusión de la ayuda que esta brindaría fue la que motivó a quienes integran esta nueva familia deportiva a seguir adelante.
Sin embargo, la presencia por parte de la administración seccional ha sido casi nula pues no ha hecho efectiva ninguna asignación aunque prometió dar 10 millones de pesos, de los 50 que fueron solicitados por la institución.
En aquella esperanzadora reunión estuvieron la presidenta de la institución, Liliana Acosta; el gobernador Julio César López Espinosa; el secretario privado José J. Domínguez y Mauricio Jara.
Sin embargo, quienes hoy sufren dentro del equipo aún no pierden la esperanza de que los compromisos se concreten, pues el campeonato apenas comienza.
El apoyo solicitado fue de 50 millones de pesos, pero el gobernador dijo que sólo podría dar diez y gestionar otros cinco por parte de la Lotería del Quindío.
Los diez no aparecen todavía y la gerencia de la lotería puso los respectivos ‘peros’ para aprobar sólo dos millones, los cuales para completar aún no han sido entregados.
El equipo que nació en 2010 con el objetivo de convertirse en el ideal de los miles de niños quindianos que practican el microfútbol y sueñan con algún día convertirse en profesionales vive una ‘infancia complicada’.
Las promesas de la administración seccional parecen quedarse sólo en eso, algo que se ha convertido en un factor común cuando de hablar de deporte se trata.
El compromiso con la actividad muscular del ‘Corazón Verde’ sigue siendo escaso y muestra de ello es Real, que se mide a los mejores del país casi con las uñas o con menos que eso.
Lo más preocupante de la situación es que la idea de continuar con el equipo en esta vigencia nació en el seno de la gobernación, pues la ilusión de la ayuda que esta brindaría fue la que motivó a quienes integran esta nueva familia deportiva a seguir adelante.
Sin embargo, la presencia por parte de la administración seccional ha sido casi nula pues no ha hecho efectiva ninguna asignación aunque prometió dar 10 millones de pesos, de los 50 que fueron solicitados por la institución.
En aquella esperanzadora reunión estuvieron la presidenta de la institución, Liliana Acosta; el gobernador Julio César López Espinosa; el secretario privado José J. Domínguez y Mauricio Jara.
Sin embargo, quienes hoy sufren dentro del equipo aún no pierden la esperanza de que los compromisos se concreten, pues el campeonato apenas comienza.
El apoyo solicitado fue de 50 millones de pesos, pero el gobernador dijo que sólo podría dar diez y gestionar otros cinco por parte de la Lotería del Quindío.
Los diez no aparecen todavía y la gerencia de la lotería puso los respectivos ‘peros’ para aprobar sólo dos millones, los cuales para completar aún no han sido entregados.
“Ya me contactaron y esta semana nos darán los dos millones”, explicó Acosta, que no obstante tiene en cuenta que estos llegarán con los respectivos descuentos.
Mientras tanto, los dolores de cabeza no terminan ahí, pues la llegada del dinero debe concretarse sí o sí, ya que el equipo deberá desplazarse a Villavicencio para encarar su tercer partido.
Dicho viaje le costará a la delegación un millón 400 mil pesos, un poco menos de lo asignado por la lotería y ni siquiera se ha concretado el aporte de Apuestas Ochoa Sured, el cual fue anunciado con bombos y platillos.
Los únicos que has puesto su grano de arena es Indeportes, a través de su gerente Edward Quintero, que en unión con Pantera inició la entrega de la dotación para el combinado, e Imdera, que garantizó el préstamo del coliseo del Café y el coliseo del Sur.
Sin duda es hora de que las instituciones cumplan su palabra y realicen un trabajo por el tejido social del Quindío, pues no tiene sentido que mientras los Potros que los quindianos observaron el sábado pasado en Armenia reciben aproximadamente 40 millones mensuales los cafeteros suden su camiseta apenas por un subsidio de transporte y con la esperanza de algún día ganar lo que merecen por defender con honor la camiseta de su tierra.
Mientras tanto, los dolores de cabeza no terminan ahí, pues la llegada del dinero debe concretarse sí o sí, ya que el equipo deberá desplazarse a Villavicencio para encarar su tercer partido.
Dicho viaje le costará a la delegación un millón 400 mil pesos, un poco menos de lo asignado por la lotería y ni siquiera se ha concretado el aporte de Apuestas Ochoa Sured, el cual fue anunciado con bombos y platillos.
Los únicos que has puesto su grano de arena es Indeportes, a través de su gerente Edward Quintero, que en unión con Pantera inició la entrega de la dotación para el combinado, e Imdera, que garantizó el préstamo del coliseo del Café y el coliseo del Sur.
Sin duda es hora de que las instituciones cumplan su palabra y realicen un trabajo por el tejido social del Quindío, pues no tiene sentido que mientras los Potros que los quindianos observaron el sábado pasado en Armenia reciben aproximadamente 40 millones mensuales los cafeteros suden su camiseta apenas por un subsidio de transporte y con la esperanza de algún día ganar lo que merecen por defender con honor la camiseta de su tierra.
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